viernes, 29 de enero de 2010
Waiting for de worms
Me quedé pensando seriamente si era tan así que Buenos Aires sabía a smog, más que a tango.
Me arrepiento. La que contestó eso fue mi yo rebelde sin causa, y no mi yo pseudopoeta empedernida, que es el que suele ganar por knock out.
Hablar del knock out me recuerda a Cortazar, y Cortazar me recuerda al jazz, que me gusta más que el tango, entonces viene Charly Parker a pelear a Gardel, pero ya son demasiados para los pocos metros cuadrados de alma que me quedan,
entonces les pido por favor que se retiren.
Buenos Aires sabía a tango, sabía a Nada y sabía a Nostalgia.
De palabras grises llenó mi estómago y vomito.
Colores, claro, mi boca es un prisma.
Y que te digo Buenos aires! Luján. Puedo hablar de Luján.
Que hoy tenía gusto a pasto verde recién cortado.
Que tenía olor a tierra mojada.
La luna estaba ahí, mostrando además, su lado oscuro.
Mirar abajo es solo eso.
Es estar esperando a los gusanos.
escribo, luego existo, luego soy
Unknown
3 comentarios:
Whala.
Pink Floyd también?
Muy interesante.
Ya lo creo.
^^
Hmm..creo que le voy a empezar a meter mano al photoshop..hmm
Buenos Aires puede saber muy dulce en ocasiones, dulce y suave...ya te voy a enseñar
:)
Tiene Bs As que se yo... algunos espacios que enamoran, otros que aterran, otros que duelen...
Otros que suenan, otros que huelen, otros que sudan...
Si si nena, decile a toda esa gente que se corra, que la tilis precisa un lugarcito :)
TKM
Publicar un comentario